9:08
Lejos, el posteo más random que me mande en el blog. Pero es un pensamiento recurrente de los que todavia no tenemos tatuajes, pero le tenemos unas ganas terribles (aunque mis tatuajes de la vida tambien tienen derecho de piso, y se pueden poner celosos) (?)
Entonces, he aquí, y presentandolo como si a alguien le importara, los tres tatuajes que me mandaria (si, posta, no hay ironias ni juegos de palabras en esto, me entintaria posta estas cosas)
Knuckes: Rebelde, veloz, se trepa a todo, tiene un caracter de mierda y es un contrera. Muy yo. Aparte, ya tengo dos dreads rojos, asi que mataria, ja.
Don Quijote: Loco desde el inicio de sus aventuras, hasta el lecho de su muerte. Los termina convenciendo a todos, pero no por cansancio, sino por convicción. Es un lancero (Gerardo) que no teme a la batalla (Martin)
El logo carajero: Que no es por la moda o por alguna falta de aceptacion, lo de tatuarse el logo de una banda. La escucho desde los malditos 13 años. Siempre tienen alguna letra para mis momentos de euforia, de bajón, de tristeza, de sosiego. Son pura actitud. Cosa que a veces cuesta trascender de lo musical. Siempre termino hablando de música. Chau.
música
3:35
Pocas veces uno se pone a determinar el porqué le gusta algo. Ya desde la primera linea, objetizar el gusto ya supone un total desinterés en explicarlo. Le gusta a uno y listo. Me gusta, qué tanto. Siempre hay más motivos para decir que no. Y asi se desata la intolerancia y sus amigos. Eso ya es crema de otra torta.
Lo más probable es que se desencadene de algo de la infancia, como en este caso, en el que me mandé todo un choclo digno de ensayo de secundaria sólo para decir de donde surgió mi fanatismo (así, muy en cursiva) por los Beatles, que (oh, casualidad) cumplen 40 años de haberse separado. Garrón.
Volviendo al tema que ME aqueja (?), la primera canción que escuchaba al levantarme (pero nunca despertarme) para ir a la escuela primaria era precisamente ésta:
(quería poner el tamaño que le seguía a este, pero no entraba en cuadro, quedaba mal, y blablabla)
Y como me estoy levantando temprano seguido, en Mañana Express (el programa que ponía mi abuela mientras nos despertaba, el programa que pone mi vieja mientras me desp... Nah, me despierto solo, che) siempre mandan alguna referencia a esta gran gran gran banda, ya que Oscar Bertone (conductor) es sabido fanático (más que Gustavo Lorenzatti, arriesgo). Y es así como, capaz que inconscientemente y sin saber un pedo de música, conocí a los cuatro de Liverpool.